SAN NICOLÁS OBISPO
DE VOCACIÓN ARTESAL EN PIEDRA VOLCÁNICA.
Vestida de color rojo y blanco, al son del mariachi, de la danza tradicional y comida típica; la tenencia de San Nicolás Obispo es una de las cinco comunidades indígenas, que festeja los días 4, 5 y 6 de diciembre su fiesta patronal, desde inicios del siglo XVI hasta el día de hoy a fin de seguir preservando sus costumbres y tradiciones. El santo al que se le pide curar enfermedades lleva el mismo nombre de la tenencia, SAN NICOLÁS OBISPO, a quien cientos de personas de distintos estados de la Republica y turistas internacionales acuden cada año a pedirle algún milagro con la encomienda de regresar en las fechas de celebración una vez cumplido lo solicitado. Durante estos días hay banda, quema de castillo, serenatas, antojitos como: pozole, mole, atole prieto, entre otros platillos tradicionales. El último día de la celebración se lleva a cabo la danza del “patrón”, donde se representan las tradiciones más comunes de “Los Monarcos” y “Las Malinches” por niñas y niños de la localidad. También se cuenta con la participación de 12 grupos de cargueros, que son precisamente las personas que asisten a la celebración patronal a “pagar su manda”, quienes dan de comer a toda la comunidad. Cabe destacar que San Nicolás Obispo es una comunidad que cuenta con alrededor de cinco mil habitantes. Han desarrollado la vocación en el trabajo de piedra volcánica y por generaciones se han dedicado a la lapidaria, técnica de tallado para convertir rocas en molcajetes, tejolotes, metates, entre muchas otras artesanías. Por lo que las y los visitantes encontraran una invaluable riqueza en piezas artesanales prehispánicas con garantía de calidad. El dominio de la técnica llevó en el 2018 a la localidad a crear “el Molcajete más grande del mundo”, elaborado por 27 artesanos, con más de dos metros de diámetro y cuatro toneladas de peso, exhibido como orgullo artesanal y atractivo en la plaza principal. Visita su templo que data del siglo XVI con retablo de estilo barroco; su cristo de pasta de caña de maíz del siglo XVI donación de Vasco de Quiroga; conoce el Cerro del Águila, que, gracias a su naturaleza, les permite extraer piedra volcánica para la elaboración del que se ha convertido en el producto representativo de la localidad, y a quien enaltecen con la tradicional “Feria del Molcajete” en donde participan alrededor de 30 productores artesanos y textileros sin faltar el legendario sazón de las cocineras tradicionales.